Cova Tallada

Denia; Alicante


Un día entre semana.

La masificación que sufre esta cavidad es exagerada.
Se ha convertido en uno de los spots del postureo por excelencia.

Por eso decidimos ir un día de noviembre, entre semana y madrugar.
Aún así, cuando salíamos de la cueva serían las 11:30, ya había varios grupos entrando.

La cueva es muy bonita, tanto la parte natural inicial como la excavación artificial que supone el fenómeno subterráneo.

Es de alguna manera una lástima que se haya popularizado tanto pero así son las tendencias. Siempre nos quedará el convencimiento de que si vamos cuando nadie iría podremos disfrutar de la cueva para nosotros solos.




Esta siguiente foto muestra la única parte de la cavidad que es de origen natural.
Y, sin embargo, se aprecia perfectamente las marcas de la talla picadas para extraer la tosca incluso en el suelo.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 800
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



Conforme abandonamos esa primera sala inicial vamos notando como la cueva es una cavidad totalmente excavada por la mano del hombre.
Recuerdo a Pasqual diciendo "Aquí picaron de calent".

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 800
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



Queríamos hacer una foto de estas pilas que construyeron en la cavidad, hay hasta cuatro, están situadas bajo puntos de goteo y les permitía almacenar algo de agua dulce.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 200
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



Con esta siguiente foto queríamos hacer destacar la técnica con la que se tallaba la roca y se extraían los bloques.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 200
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



La cavidad no es muy grande, 270 metros en planta, pero en algunos puntos presenta grandes volúmenes.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 800
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s


Mina del Mas del Riu

Castell de Cabres; Castellón


Un filón de lignito.

Este primer sábado de noviembre nos animamos a echar un viaje para visitar esta mina, que llevaba mucho tiempo apuntada en un papel.
Cerca no está.

Uno de los alicientes es que es muy extraña la existencia de explotaciones de carbón mineral en la Comunidad Valenciana. Y esta es una de ellas.

La Mina del Mas del Riu está en el corazón de esas montañas de Els Ports donde parece que ya no pase nadie.
Cuando preparamos la salida estuvimos estudiando el acceso por las pistas para que la aproximación fuera lo más liviana posible pero no contábamos con que las pistas forestales en aquella zona están cerradas con puertas si los terrenos pertenecen a alguna masía.

Una vez allí y vista la situación decidimos que patearíamos los kilómetros que habíamos pensado recorrer con el coche. Ya no es solo la aproximación por pista y sus desniveles, es que luego hay que bajar al lecho del rio Escalona por un terreno no definido y caminar por él hasta localizar la mina.

Fue una paliza de día, eso sí, pero en un entorno magnífico vestido en sus galas de otoño.



La mina se presenta como una galería rectilínea y horizontal en la que recorremos más de un centenar de metros hasta que nos encontramos un derrumbe donde se observa que la galería atraviesa un potente filón de lignito, nosotros no progresamos más allá de este derrumbe.
Como a mitad de recorrido comienza a aparecer el agua, que encharca la galería con su solera totalmente tapizada de gours.
Esta siguiente foto la hicimos justo antes del derrumbe donde los colores de estas chorreras contrastan con los grises de la galería en ese punto.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 200
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



Con la siguiente foto queríamos mostrar esta solera llena de gours de la que hablábamos anteriormente. En este punto aún no habíamos llegado a las zonas encharcadas.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 200
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s



Al inicio de la galería, pocos metros después de la bocamina, nos encontramos con estas interesantes estalagmitas que parecen fruto de un goteo de tiempos pasados, en un momento en que esta parte de la galería debió también estar inundada.

    Canon EOS 6D MarkII           f/7.1        ISO 100
    Canon EF 17-40 f4L            17mm        1/160s